Alberto Espelosín ha escrito un artículo que comienza así: “Hoy hace un año aterricé en Padilla 32 en una atmósfera de paredes clásicas pero con personas muy jóvenes. Encontré una compañía con un modelo único de asesoramiento en el que el foco está en la persona y no en las necesidades del balance de la entidad. Conocer la institución, filosofía, clientes y personas que trabajan en ella fue mi primer objetivo. El segundo, preparar el lanzamiento de Abante Pangea y transmitirlo a los clientes. El 17 de mayo se produce el nacimiento oficial del fondo. Desde entonces, he procurado seguir con mi disciplina de gestor y mi ritmo de vida se ha divido, como siempre lo he hecho, en tercios: 1/3 leer, pensar y escribir, 1/3 gestionar delante de la pantalla y 1/3 dar conferencias y estar con clientes contando lo que hago y pienso. Dedicación, determinación y decisión siguen siendo las tres “D” en las que fundamento mi acción diaria”.
Continúa señalando que “llegados a este aniversario, estamos cerca de 50 millones de euros de patrimonio en el fondo en 5 meses de actividad lo que dice mucho del equipo de Consejeros Financieros que me ayuda en la consecución del objetivo inicial de alcanzar los 100 millones en un espacio de tiempo razonable. Ante la pregunta clásica de ¿Alberto, estás contento con el nuevo trabajo? la respuesta categórica es SI. Muchas gracias a todo Abante, a mi familia y amigos por su ayuda para hacer realidad Pangea”.