Carlos Albo, CEO de Exponent Consultores, explicó en una jornada patrocinada por Fujitsu que “estamos asistiendo a una revolución tranquila que está cambiando la distribución de seguros a través de la tecnología, transformando la relación de los consumidores con las aseguradoras y los canales de distribución”.
Apoyó esta afirmación en un dato contundente: los usuarios de seguros visitan una media de 11 sitios web antes de tomar la decisión de compra. Esto no significa que culminen su compra a través de Internet. De hecho, sólo el 3,6% de los procesos de tarificación y/o venta online acaban en el mismo canal. Según datos de la DGSFP citados por Albo, el 63% de los seguros de no vida se venden en canales intermediados por agente o corredores.
Para Albo, el valor añadido del mediador pasa por la profesionalidad, la confianza, el precio, la calidad, el servicio o el conocimiento del mercado de un sector en el que operan en España 100.000 profesionales. Frente al mito de que el seguro intermediado es caro, aportó datos extraídos de un estudio de aimfri.com que demuestran que los precios de una póliza intermediada y los de una directa son similares e, incluso, más económicos en el caso de aquellas obtenidas con la ayuda de un mediador.
También profundizó en las ventajas de los marketplaces en el sector asegurador, insistiendo en el hecho de que “son beneficiosos para todos los grupos de interés, tanto usuario como aseguradora y mediador”, debido al gran número de vendedores, la amplitud de la oferta y la posibilidad de compararla o la reducción de los costes de transacción. También citó como una ventaja capital el menor coste de posicionamiento y acceso a la tecnología: “Los mediadores encuentran en el marketplace una gran visibilidad on-line en una web con tráfico y consolidada, disponiendo de una web de negocio a un coste muy competitivo y accediendo a la posibilidad de adquirir contactos y clientes potenciales a través de un nuevo canal online. Además, con la posibilidad de que su precio de tarifa se adapte a las condiciones que el mediador tenga con las aseguradoras”.
Apoyó esta afirmación en un dato contundente: los usuarios de seguros visitan una media de 11 sitios web antes de tomar la decisión de compra. Esto no significa que culminen su compra a través de Internet. De hecho, sólo el 3,6% de los procesos de tarificación y/o venta online acaban en el mismo canal. Según datos de la DGSFP citados por Albo, el 63% de los seguros de no vida se venden en canales intermediados por agente o corredores.
Para Albo, el valor añadido del mediador pasa por la profesionalidad, la confianza, el precio, la calidad, el servicio o el conocimiento del mercado de un sector en el que operan en España 100.000 profesionales. Frente al mito de que el seguro intermediado es caro, aportó datos extraídos de un estudio de aimfri.com que demuestran que los precios de una póliza intermediada y los de una directa son similares e, incluso, más económicos en el caso de aquellas obtenidas con la ayuda de un mediador.
También profundizó en las ventajas de los marketplaces en el sector asegurador, insistiendo en el hecho de que “son beneficiosos para todos los grupos de interés, tanto usuario como aseguradora y mediador”, debido al gran número de vendedores, la amplitud de la oferta y la posibilidad de compararla o la reducción de los costes de transacción. También citó como una ventaja capital el menor coste de posicionamiento y acceso a la tecnología: “Los mediadores encuentran en el marketplace una gran visibilidad on-line en una web con tráfico y consolidada, disponiendo de una web de negocio a un coste muy competitivo y accediendo a la posibilidad de adquirir contactos y clientes potenciales a través de un nuevo canal online. Además, con la posibilidad de que su precio de tarifa se adapte a las condiciones que el mediador tenga con las aseguradoras”.