Autoridad Europea de Valores y Mercados (ESMA, en sus siglas en inglés) ha elaborado una serie de medidas sobre el control de los inversores que entrarán en vigor en España el próximo 21 de diciembre. Así, la ESMA regula que `las empresas de inversión deben adoptar medidas razonables para comprobar la fiabilidad de la información recogida sobre los clientes, como pedirles datos reales sobre su situación financiera´. Además, incluye que los clientes que se planteen entrar en instrumentos de escasa liquidez deberán aportar información sobre sus activos líquidos, inversiones e inmuebles, que incluirán las inversiones financieras, los inmuebles para uso propio y con fines de inversión, fondos de pensiones, depósitos en efectivos, etc.
La ESMA insiste en que las empresas de inversión son siempre responsables de cerciorarse que poseen información apropiada para realizar la evaluación de la idoneidad y, por tanto, aconseja verificar si existen inexactitudes evidentes en la información facilitada por sus clientes. Sin embargo, los asesores tienen libertad para decidir cómo informarán a sus clientes de que se va a realizar un examen de idoneidad, incluso prevé que pueda hacerse en formato normalizado. Por último, recuerda la necesidad de una adecuada formación y cualificación del personal que va a analizar la idoneidad del cliente.