Tras los claros defectos en la supervisión del asesoramiento financiero que se ha prestado al cliente en los últimos años, cuyo caso más llamativo son las participaciones preferentes, la CNMV está decidida a aplicar medidas más directas y prácticas para conocer cómo se están comercializando los productos financieros en España y si esta comercialización cumple con las normativas vigentes, especialmente con la MiFID. Una de las medidas fue anunciada por la presidenta de la Comisión, Elvira Rodríguez, en diciembre: Realizar acciones del denominado Mistery Shopping en los centros donde se vendan productos financieros. Se trata de incrementar la supervisión preventiva, en lugar de centrarse únicamente en acciones sancionadoras a posteriri, si se han cometido irregularidades.
El Mistery Shopping de la CNMV consistirá en la visita de incógnito de sus técnicos a las sucursales financieras, quienes podrán conocer directamente las técnicas y tácticas de comercialización que aplica la entidad visitada; así como las condiciones de los productos que oferta. Si de la visita se derivan acciones incorrectas o productos mal vendidos, la Comisión iniciaría un expediente informativo, que podría derivar en sanciones. Aunque la medida está claramente orientada a vigilar las oficinas bancarias, los asesores financieros independientes también podrían ser visitados de incógnito por los inspectores de la Comisión.
Según Rodríguez, esta técnica de supervisión ya se utiliza en varios países europeos y también es usada por otros organismos de la Administración española. Resume sus intenciones así: “El objetivo es cumplir con nuestra responsabilidad de forma más eficaz”.
Según Rodríguez, esta técnica de supervisión ya se utiliza en varios países europeos y también es usada por otros organismos de la Administración española. Resume sus intenciones así: “El objetivo es cumplir con nuestra responsabilidad de forma más eficaz”.