El nuevo fraude en UBS constata el poco control en las filiales de banca privada

Parece mentira pero ha vuelto a ocurrir. El suizo UBS descubre pérdidas de hasta 1.600 millones de euros en operaciones no autorizadas de uno de sus operadores de la banca de inversión, el agente de Bolsa de 31 años, Kweku Adoboli, que ha sido detenido en Londres sospechoso de ser el presunto autor de estas operaciones. El caso incluso podría llevar al banco a presentar pérdidas en el tercer trimestre, aunque ha declarado que las operaciones no autorizadas no afectaron a las posiciones de los clientes. Según ha reconocido el propio banco, este caso tiene muchas similitudes con el fraude del broker Jêrone Kerviel en Société Générale, que le costó a la entidad francesa unos 5.000 millones.

miércoles, 21 de septiembre de 2011

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